Mucho se ha discutido sobre la conveniencia o no de la educación diferenciada. Para adentrarnos en este tema es importante previamente precisar sus alcances.
La educación diferenciada es un método pedagógico que busca separar al género masculino y al género femenino en las instituciones escolares. Esta ideología manifiesta que las necesidades e intereses de los niños y las niñas son diferentes y busca potenciar las características de cada género de manera más personalizada, manteniéndose un mismo currículo para niños y niñas.
Luego de tener claro esto, nos planteamos el siguiente interrogante: si los seres humanos, hombre y mujer, somos iguales, ¿cuál es el fundamento de la educación diferenciada?
La respuesta a ello es que este modelo parte de la idea de que las mujeres y los hombres son iguales entre sí, en dignidad, en capacidades e inteligencia, pero que se diferencian en su estilo de aprendizaje, en que perciben el mundo diferente y se desarrollan física y emocionalmente diferente. Esta opción de educación por sexos busca sacar provecho de esas diferencias para facilitarles mejores oportunidades de desarrollo como personas.
Este modelo es controversial porque suele confundirse con desigualdad y discriminación. Al darle a cada género un trato diferente, se está tratando de acuerdo con lo que, por naturaleza, tiene unas características distintas. En la discriminación, se da un trato diferente, pero de manera injusta. Otros contradictores aducen que este modelo perjudica la socialización de los alumnos al separarlos por sexo. Pero el modelo diferenciado plantea que la socialización se produce de manera satisfactoria en escenarios como la familia y otros ámbitos sociales y, por lo tanto, no es necesario que se dé también en la escuela.
De acuerdo con la Asociación Latinoamericana de Centros de Educación diferenciada, existen ventajas de este tipo de educación como son:
- Es una educación fundamentada en la libertad que respeta la igualdad de géneros.
- Es personalizada porque potencia sus capacidades de acuerdo con su personalidad.
- Potencia la excelencia académica porque, al ser grupos homogéneos, se facilita la concentración y cada estudiante puede ir a su ritmo.
En conclusión, la educación diferenciada es un modelo pedagógico reconocido internacionalmente. Esta fórmula favorece la igualdad de oportunidades y ayuda a superar estereotipos de género, fortalece también la personalización en la educación de niños y niñas. De esta manera, cada alumno/a dispone del entorno y las herramientas para conseguir la mejor versión de sí mismo.
Me encanto‚ muy buen tema